TELETRABAJO: HOME OFFICE

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No te quedes atrás y conoce la nueva modalidad de trabajo. Implementa el teletrabajo en tu empresa. Aprovéchate de los beneficios que puede aportar a tu organización.

Estudios en teletrabajo: home office

¿Qué es el teletrabajo? Etimológicamente, el teletrabajo se entiende como el desarrollo del trabajo desde un lugar distinto al habitual. Podemos hablar de una modalidad laboral flexible, da la posibilidad al empleado de ejecutar sus tareas de forma remota. Todo esto se puede realizar gracias a las infraestructuras y oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías.  

La distancia pasa a ser un concepto relativo. La forma de trabajar puede modificarse, alternado la presencialidad  y el teletrabajo. Este último, puede realizarse en remoto a través de las aplicaciones de los sistemas de la compañía. Es por ello, las comunicaciones y las tecnologías transforman la manera de dar los servicios.

Debemos tener en cuenta que teletrabajar no hace referencia solo al trabajo desde el domicilio particular. Existen diferentes opciones para llevar a cabo las tareas, por ejemplo, un hotel o una segunda residencia. Solo es necesario tener las condiciones de conexión adecuadas.

Los instrumentos necesarios para el desarrollo de esta forma de trabajo son los siguientes:

• Ordenador.
• Conexión a internet.
• Teléfono.

De este modo, se puede flexibilizar y ser productivos para la empresa y el trabajador. Antes de implantarse este modelo, durante los viajes de trabajo, los empleados perdían tiempo en ejecutar esas tareas que no había podido realizar por el tiempo invertido en el viaje. Así pues, pueden adelantar las tareas durante su jornada, reduciendo los tiempos muertos.

En estos momentos, el empleado puede acudir a reuniones de forma virtual, transferir datos,…Las nuevas herramientas permiten hacer más eficientes los procesos y, por ende, la productividad de los mismos.

La situación actual en España

¿Cómo se desarrolla el teletrabajo en España? ¿Están preparadas las organizaciones para ofrecer esta opción?

El teletrabajo llega a España a lo largo de las dos últimas décadas del siglo XX de la mano de las nuevas tecnologías. Por esto, no es casualidad que el sector productivo que más teletrabajo aporta sea el de las TIC’s.

En cifras, en España hay unos 357.000 empelados bajo esta modalidad.  Mientras que en Europa existen unos 10 millones de empleados que prestan sus servicios a través de la modalidad de teletrabajo. Esto representa aproximadamente un 6% del total.

En este ranking, Alemania y Reino Unido se situan en los primeros puestos con más de 2 millones de teletrabajadores. En la cola se sitúa Irlanda, con unos 61.000 trabajadores en remoto.

Casi el 98% de las empresas españolas con más de 10 trabajadores, disponen de conexión a la red y que el uso de las nuevas tecnologías está extendido al 99% de las mismas. Que en un 95% está implementada la telefonía móvil y que más del 60% disponen de web site. Los datos abalan que las infraestructuras permiten la modalidad de teletrabajo, pero ¿qué falla?

Es probable que los factores culturales o lo propios valores del territorio sean los motivos para una implementación tan baja en nuestro país.

¿Qué beneficios tiene el teletrabajo?

El teletrabajo se ha originado como una actividad propia de las compañías avanzadas. Esto requiere que el cuadro de mando se adapte a las necesidades de la compañía y sensibilizar al colectivo de trabajadores con esta nueva perspectiva. Por esta razón, en España, el modelo de trabajo remoto es una opción residual. Enfocada a colectivos muy específicos.

Sin embargo, este modelo representa grandes beneficios para el empleado, por ejemplo, los siguientes:

• Conciliación de la vida laboral y la vida familiar.
• Ahorro de tiempo y dinero en trasporte y desplazamientos.
• Reducción del estrés laboral.
• Mejora de la formación continúa del trabajador, al incrementarse los canales online.
• Desarrollo de motivación y un sentimiento de autorrealización.
• Generar puestos de trabajo afines con personas con dificultades de movilidad o discapacidades.
• Mejora de los ratios de empleabilidad en zonas rurales.
• Disminuye el grado de accidentabilidad laboral, reduciendo los accidentes “in itinere”.

Así mismo, esta modalidad de trabajo también tiene ventajas para las empresas, a saber:

• Fomento el entorno multicultural y de diversidad en las compañías.
• Madurez de las empresas a través de la gestión esta modalidad de trabajo, consigue que las organizaciones se hagan más maduras.
• Mejora de los ratios de productividad individual y colectiva.
• Potencia el sentimiento de engagement  entre el empleado y su compañía, mejorando la motivación y la confianza mutua.
• Fidelización de los trabajadores.
• Reducción del absentismo por enfermedad común y por accidente de trabajo.
• Desarrollo del capital humano de la empresa con equipos multiculturales.
• Imposición de un estilo de liderazgo más aceptado y flexible dentro de la empresa.

¿Cómo implementar un sistema de teletrabajo?

Es importante considerar que se debe garantizar un equilibrio entre flexibilidad y seguridad tanto para el empleado como para la organización. Se empieza a entender que la práctica del teletrabajo es una forma de conciliación de la vida laboral y la vida familiar. El objetivo principal es compatibilizar y que tenga ventajas para ambas partes:

• El empleado, por su parte, puede prestar los servicios desde un lugar cómodo y compaginarlo con las responsabilidades familiares.
• La empresa ofrece una herramienta de motivación que mejora la productiva y, por ende, la capacidad productiva de la organización.

El teletrabajo puede dividirse en dos tipos:

• Mobile Worker: los trabajadores desarrollan sus tareas unos días desde las instalaciones de la empresa  y otros desde el lugar habilitado fuera de la organización.  En este caso, es el trabajador el que decide qué días trabaja desde un lugar u otro.
• Teletrabajador continuo: el empleado trabaja desde cada desde el inicio de la relación laboral.

El primer paso a la hora de implementar un equipo de teletrabajo es la identificación de los puestos. Para que esta experiencia sea continua en el tiempo debe ser aceptada y valorada por el conjunto de la organización. Seguidamente, se han de identificar con los facilitadores y las barreras potenciales.

En el proceso de selección, se debe tener en cuenta que el trabajador debe tener una predisposición hacia prestar sus servicios bajo esta modalidad. Asimismo, el proyecto ha de estar liderado por la cúpula directiva.

No podemos olvidar hacer énfasis en que debe ser un programa voluntario. Potenciando la igualdad de oportunidades y ligado al desarrollo profesional en la organización. Se tiene que establecer también un proceso de seguimiento y control que se implemente y realmente sea un indicador de la evolución y cumplimiento de los objetivos.

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