
Un aspecto fundamental en cualquier tipo de aprendizaje se basa en la denominada educación bilingüe. En la actualidad, es impensable concebir y diseñar un espacio educativo o empresarial sin contar con este valioso factor lingüístico.
Educación bilingüe: características y beneficios
Sin duda alguna, los programas de educación bilingüe son una poderosa herramienta para el desarrollo intelectual y psicosocial de cualquier estudiante. Aparte de promover el aprendizaje de nuevas lenguas, estamos enriqueciendo nuestro conocimiento a través de la cultura. Los valores y tradiciones de otros países y regiones. Gracias a la educación impartida en más de un idioma, los niños mejoran su rendimiento en lectura, ortografía y comprensión verbal (aspectos claves en el rendimiento académico). Por otra parte, está científicamente demostrado que el desarrollo del bilingüismo provoca en los niños un tipo distinto de conexiones neuronales. Ayudan al cerebro a interpretar y analizar mejor el entorno y la comunicación interpersonal. De hecho, existen estudios que confirman que los síntomas de la enfermedad de Alzheimer se retrasan varios años en las personas bilingües. Además, el aprendizaje bilingüe también fomenta otros aspectos evolutivos importantes. Por ejemplo, la visión espacial, la memoria, la concentración o la atención focalizada. Por último, no debemos olvidar que favorece la socialización. Además, ayuda a superar problemas como la timidez, la falta de confianza o una baja autoestima.Desarrollar una carrera profesional en inglés
Resulta innegable el pensar que, a medio y largo plazo, llevar a cabo una educación y una carrera profesional en inglés puede resultar una excelente y fructífera decisión. Dominar el inglés y otros idiomas nos abrirá infinidad de puertas tanto a nivel nacional como internacional. Por otro lado, en un mundo cada vez más globalizado e interconectado, es vital saber desenvolverse de manera fluida con personas de otros países y continentes. Es aquí donde entra el concepto de competencia lingüística. Este factor, fundamental para obtener un óptimo desarrollo laboral, hace referencia al conocimiento que se tiene de idiomas distintos al propio. En la actualidad, la práctica totalidad de los sectores laborales (tecnología, marketing, informática, finanzas, relaciones comerciales, comunicación audiovisual, etc.) demandan una alta competencia en la educación bilingüe y, sobre todo, en el inglés. Si queremos optar a puestos de responsabilidad y prestigio, debemos adquirir esta competencia lingüística. Según la norma europea, esta capacidad comunicativa engloba tres áreas; la competencia lectora (comprensión de los textos escritos), la competencia oral (capacidad para hablar y escuchar correctamente) y, por último, la relacionada con la composición de textos, muy importante, por ejemplo, en profesiones relacionadas con el comercio o la publicidad. Además, no podemos olvidar que el inglés es el idioma que domina los negocios y las finanzas a nivel mundial. Por ello, es fundamental adquirir el léxico necesario y específico de este ámbito profesional. El objetivo es conseguir un aprendizaje integral pero centrado en un campo concreto. Para que pueda adaptarse a las necesidades propias de un determinado cargo profesional.
Es fundamental conseguir esta competencia lingüística para optar a puestos de responsabilidad y prestigio en el sector laboral.